English version HISTORIA de una HISTORIA FAMILIAR |
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| ( ...o de cómo se ha ido elaborando esta Genealogía) | Puntallana (La Palma, Canarias), donde hace 250 años empezó a escribirse esta Historia |
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"Thomas de Abreu Crespo y Oropesa, Natural desta
Ciudad, como mas âya lugar en Derecho..."... Así comienza un documento extendido en Santa Cruz de la Palma el nueve de Septiembre de mil setecientos sesenta y cinco, ante el Alcalde Mayor de la Palma, Licenciado León, y el Escribano Público Santiago Albertos y Alvarez. Tomás de ABREU CRESPO y OROPESA era mi 5º abuelo (el abuelo de mi tatarabuela). Nació el 10 de enero de 1747 en el lugar de Puntallana, en la Isla de La Palma, la más noroccidental de las Canarias en el Océano Atlántico. |
Páginas de la Ejecutoria de Nobleza de Don
Tomás de ABREU (1765) |
Don Tomás fue, a juzgar por su carrera, sus actos y sus logros, un hombre de gran empuje y ambición. En 1765, cuando Tomás contaba 18 años, solicita la apertura de una "Ejecutoria de Nobleza". Este expediente oficial consistía en una serie de investigaciones judiciales a lo largo de las cuáles, mediante declaraciones de testigos y presentación de documentos, quedara demostrada la pertenencia de Tomás y de su familia a la clase de la Nobleza (en su caso, la pequeña Nobleza no titulada, los llamados "hidalgos" del Reino de Castilla). No se trataba de halagar la vanidad propia o la del clan, ni de obtener un simple reconocimiento social. Por el contrario, el objetivo era inmediato y muy práctico, ya que el reconocimiento de su status le permitiría no sólo obtener determinados privilegios y honores y le abría la posibilidad de matrimonios económicamente ventajosos, sino sobre todo le facilitaba el alcanzar títulos universitarios, ejercer determinadas profesiones u ocupar cargos públicos. |
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Tomás no pertenecía a la aristocracia tal como la imaginamos si pensamos en las imágenes de las Cortes Reales. Su familia procedía, tanto en la rama paterna como en la materna, de campesinos, que aunque eran propietarios de sus tierras y debieron disponer de lo que en Canarias era un buen patrimonio, cultivaban por sí mismos muchos de los campos de su propiedad. A mediados del siglo XVIII parece producirse el enriquecimiento de algunos de estos campesinos propietarios en La Palma. El agua, el oro blanco de Canarias, contribuyó en gran parte a este enriquecimiento: parece ser que la aplicación de nuevas técnicas obtuvo el "alumbramiento" de nuevas aguas, o sea, el descubrimiento de caudales subterráneos. Un número significativo de estos campesinos acomodados, muchos de ellos oficiales y suboficiales de las Milicias de Canarias, proporcionó estudios y carrera a sus hijos, que se convirtieron rápidamente en el embrión de una nueva clase dirigente de la sociedad isleña, ilustrada y progresista. Tomás, por ejemplo, fue Licenciado en Derecho y Abogado de los Reales Consejos. Éste fue el origen de los profesionales y propietarios del siglo XIX, la burguesía que arrebató el poder a la nobleza tradicional. En algunos casos se trató de episodios revolucionarios: Don Tomás de ABREU CRESPO y OROPESA fue elegido Diputado del Común del Cabildo (Consejo Insular) de La Palma, el 2 de enero de 1773, una semana antes de su 26º cumpleaños. Fue la primera elección efectiva (tras la fallida de 1767) de miembros del Cabildo tras doscientos años de dominio de la Nobleza. En otros casos, ramas segundonas de la aristocracia tradicional, o descendientes de uniones ilegítimas de la aristocracia, se unieron en matrimonio a miembros de esta nueva clase dirigente. Este fue también el caso de Tomás de ABREU (una de cuyas bisabuelas fue madre soltera, y que casó con una dama LAZCANO que descendía de esta familia y de la ilustre Casa de SALAZAR a través de uniones ilegítimas de sus antepasados), que en numerosos aspectos puede tomarse como representante del gran cambio social de la Europa del Siglo de las Luces. |
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Don Tomás de Abreu Crespo y Oropesa obtuvo su Ejecutoria, para la cual presentó numerosos documentos y testimonios sobre sus padres y abuelos, así como sobre otros miembros de la familia. De esta manera se pudo elaborar la historia familiar de los cien años anteriores, comenzando en el siglo XVII. |
Escudo de la Familia ABREU, cuyo uso fue reconocido a Don Tomás de ABREU CRESPO y OROPESA, y siguiendo la costumbre española, a sus descendientes |
... y desde entonces, cada generación continúa la tarea
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Desde entonces, cada generación se ha ido transmitiendo los
documentos que forman el pequeño archivo familiar, iniciado por Don Tomás en el siglo
XVIII. En cada generación ha habido un miembro de la familia, nombrado por testamento o
legado del anterior, encargado de custodiar la documentación, y si fuera posible, de
ampliarla. La línea de transmisión de
la documentación (y los años en los que ha estado al cuidado de cada uno) ha sido la
siguiente:
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GENEALOGIA DE LA TRANSMISIÓN DE LOS DOCUMENTOS FAMILIARES
Tomás de ABREU __ Antonia Josefa de ABREU __ Rosa María __ Federico LÓPEZ ABREU
CRESPO y OROPESA | CRESPO y OROPESA | de ABREU LÓPEZ | (1848-?)
(1747-desp.1773) | (1776-?) | (1816-ant.1877) | X --------------------- LÓPEZ CASANOVA, LÓPEZ PÉREZ
X -----------| | X ------------------| Carmen MARTÍN ROMERO y LÓPEZ MARTÍN
Beatriz LAZCANO y |__ Cayetano de ABREU CRESPO | José LÓPEZ ESPINOSA |
GORDEJUELA YANES | y OROPESA | de la BARREDA |
MONTEVERDE | (1778-?) | (1811-ant.1877) |__ Adelina LÓPEZ ABREU
(1754-desp.1840) | | | (1851-1933)
|__ Lorenzo de ABREU LAZCANO | | X --------------------- CASANOVA de AYALA, ESPAÑA CASANOVA
| y GORDEJUELA |__ Josefa de ABREU LÓPEZ | Félix CASANOVA SOLER y LÓPEZ CASANOVA
| (1779-1832) | (1818-?)X |
| X ------------------| X |
| Margarita LÓPEZ MARTÍNEZ | Antonio LÓPEZ MONTEVERDE |
| (1796-1862) | (hacia 1801-des.1855) | Dolores REYES GONZÁLEZ
| | | (1880-1919)
| | | (1st) X --------------------- ORAMAS VILLAMANDOS, VILLAMANDOS IGLESIAS
|__ Tomás de ABREU LAZCANO |__ Bruna de ABREU LÓPEZ | Pedro VILLAMANDOS PINTO CABRERA VILLAMANDOS
| (1782-?) | (hacia 1819-?) | (1882-1925)
| | | (2º) X ------------------¡-- Fernando VILLAMANDOS
| | |__ Margarita LÓPEZ ABREU __ Margarita Leonor | CABRERA-PINTO
| | (1855-1944) | CABRERA-PINTO y LÓPEZ-ABREU | (1922-2016)
| | X ------------------| (1888-1959) | X -------------------- FAMILIAS VILLAMANDOS LORENZO,
| | Fernando CABRERA-PINTO | | Ana MARTÍN MARTÍN VILLAMANDOS BAYO y LUIS VILLAMANDOS
| | y LÓPEZ | | (1923-2019)
| | (1855-1920) | |
| |__ Estéfana de ABREU LÓPEZ |___ Marietta CABRERA-PINTO | Beatrix SERAL ARANDA
| | (abt.1820-?) y LÓPEZ-ABREU | (1953-1997)
| | X --------------------- FAMILIES AROZENA del (1894-1972) | X ------------------- Mayec RANCEL SERAL
| | Juan Antonio CASTILLO, |__ Estéban VILLAMANDOS __ Julio Néstor RANCEL (priv.)
| | del CASTILLO MARTÍN AROZENA CONCEPCIÓN | CABRERA-PINTO | VILLAMANDOS x
| | | (1922-1922) | (priv.) Begoña GONZÁLEZ LÓPEZ
| | | | X (priv.)
| | | | Roy Lee GENTRY
| | |__ Margarita VILLAMANDOS | (priv.)
| | CABRERA-PINTO |
| |__ María Dolores de ABREU LÓPEZ (1924-2020) |
| | (1823-1914) X ------------------|___ Francisco RANCEL __ Francisco José __ Ariadna RANCEL ARRANZ
| | Julio RANCEL MARTÍN | VILLAMANDOS | RANCEL MEDINA | (priv.)
| |__ Beatriz de ABREU LÓPEZ (1922-1998) | (priv.) | (priv.) |
| | (1825-?) | X ---------------| x -----------------|
| | | Isaura (Sabrina) | Diana ARRANZ MAESTRO |
| | | MEDINA NARANJO | (priv.) |__ Mario RANCEL ARRANZ
| | | | (priv.)
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| |__ Lucía de ABREU LÓPEZ | |__ Patricia RANCEL
| (1827-?) | MEDINA
|__ José Domingo de ABREU | (priv.)
LAZCANO |
(1783-bet.1823 and 1828) |___ Sergio RANCEL
X --------------------- FAMILIES SAAVEDRA ABREU, SARDINERO ABREU, POLO LÓPEZ, | VILLAMANDOS
Eugenia María SEBASTIÁN ABREU, ROJAS PÉREZ, PÉREZ TORRES, PÉREZ JAUBERT, | (priv.)
LUJÁN VOLCÁN PÉREZ FLORIDO, MARTÍNEZ CEBALLOS, ALARCO HERNÁNDEZ, |
(abt. 1781-1844) HERNÁNDEZ VERNAL, VIDAL HERNÁNDEZ, LUQUE PÉREZ, ETC... |
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|___ Isabel Margarita
RANCEL VILLAMANDOS
(1962-1972)
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Margarita LÓPEZ ABREU, depositaria de los documentos de la Familia desde antes de 1877 hasta 1944 |
Marietta CABRERA-PINTO y LÓPEZ-ABREU, depositaria de los documentos de la Familia entre 1944 y 1972 |
LO QUE HE HECHO, Y COMO LO HE HECHO...
Cuando recibí los documentos de la familia, a la muerte de mi tía-abuela Marietta CABRERA-PINTO LÓPEZ-ABREU, en mayo de 1972, éstos eran una simple acumulación de papeles. Conocíamos la historia de la familia procedente de la Isla de la Palma, desde el siglo XVIII. Había documentos aislados, y dibujos de croquis parciales de la genealogía de algunas ramas, pero no un diseño global, ni siquiera una idea general de hasta dónde podía extenderse la familia. El archivo incluía una copia-facsímil de un libro publicado en Tenerife en el año 1924, obra de Dacio Valentín Darias y Padrón, titulado "Linajes herreño-gomeros, Familia Espinosa-Ayala". Sabíamos que esa obra incluía a buena parte de nuestros antepasados, procedentes de la isla del Hierro, la más pequeña de Canarias. Pero no se había hecho una labor de aclarar exactamente por qué líneas y a través de qué personas se extendía nuestra genealogía herreña.
Durante varios años me dediqué, en ratos libres y con intensidad variable, a la tarea de sistematizar, aclarar y 'dibujar' las genealogías presentes en los documentos de la familia. A continuación vino la tarea de 'desbrozar' las genealogías contenidas en el libro de Darias y Padrón, que se había basado no sólo en investigaciones personales realizadas en los archivos de las islas, sino en trabajos anteriores de miembros de su familia que habían repertoriado numerosas actas de bautismo y matrimonio, escrituras de testamentarías, etc...
Las genealogías de la isla del Hierro, que en varios casos llevan a su vez a familias de Tenerife y Gran Canaria o a conquistadores portugueses, castellanos, andaluces y extremeños, resultaron ser una auténtica mina de oro de información. No fue tarea fácil, ya que en la isla más pequeña de Canarias hubo más o menos diez familias que enlazaron mediante matrimonios endogámicos durante 3 siglos. La repetición de nombres y apellidos, y el entrecruzamiento de éstos, así como de las líneas de parentesco, llegaban a veces a ser un tanto enloquecedores. Por otra parte, tras años de contrastar la información de Dacio V. Darias y Padrón con otras fuentes (Viera y Clavijo y su clásica "Historia de Canarias", entre otras), me permití corregir algunas interpretaciones de Dacio que, normalmente muy exacto, se dejó llevar en algún caso por una confusión, o por un exceso de romanticismo a la hora de ligar alguna rama familiar con los Menceyes (Reyes) guanches de Tenerife. Hay un origen en éstos por parte de una rama de la familia, tal como lo explico en estas páginas, pero no tal y como lo interpretó Dacio.
Otro elemento curioso de mi trabajo con este autor fue que a la copia que había heredado con los archivos familiares le faltaba una página que parecía contener una información importante para entender varias líneas principales de parentesco dentro de la familia. Puesto que en 1979 me trasladé a vivir en Madrid -y en 1985, a Bruselas-, traté de acceder a un ejemplar completo del libro durante mis vacaciones en las islas, mediante contactos con librerías y bibliotecas. Aunque realizaba intentos año tras año, era inútil. El libro no sólo estaba agotado, por supuesto, desde hacía mucho tiempo, sino además todos sus ejemplares parecían haber desaparecido del mapa. Por fin, ya en los años 1990, la Biblioteca Municipal de Santa Cruz de Tenerife repertorió, entre los libros recibidos como legado de un bibliófilo de la ciudad, un ejemplar de "Linajes herreño-gomeros". Con ello pude acceder a la fatídica página ausente en mi copia, y pude comprobar varios enlaces que me faltaban.
Cuando contraje matrimonio con Beatrix SERAL ARANDA en 1979, ella conocía la genealogía de su familia paterna, los SERAL de Aragón, en las anteriores doce generaciones. Fue muy sencillo incorporarla a la mía. Años después, un pariente de la familia materna de Beatrix elaboró una genealogía muy completa de las últimas seis generaciones de la familia ARANDA, que vino a añadirse al árbol familiar existente.
Una vez fijadas las ramas que llamo "herreñas" -aunque en realidad son de múltiples orígenes- mis investigaciones fueron por otros caminos. Me dediqué a profundizar en la historia de mi familia paterna, los RANCEL y los MARTÍN. El Archivo Municipal de Santa Cruz de Tenerife, así como el Archivo Diocesano de Tenerife (en la ciudad de La Laguna) y el Parroquial de la Concepción de Santa Cruz de Tenerife me han sido de gran ayuda para precisar datos recogidos de algunos documentos familiares, para comprobar memorias y recuerdos de los miembros más ancianos de la familia, e incluso para descubrir elementos nuevos de los que nadie se acordaba. He pasado muchos días de vacaciones investigando en dichos archivos, y, como siempre, el trabajo no está cerrado. Hay muchas líneas de investigación abiertas.
Varios libros sobre Historia de las islas en general y sobre genealogías isleñas en particular me han proporcionado nuevas informaciones o confirmación de las que ya tenía. El Nobiliario de Canarias ha sido y sigue siendo un instrumento precioso en la reconstrucción de muchas líneas de la familia.
Sólo en una ocasión he recurrido a una firma comercial para la búsqueda de actas de registros a los que no podía acceder fácilmente (en Cádiz y Zaragoza).
A todos estos medios, "clásicos", se ha venido a añadir el Internet. No es que haya encontrado árboles genealógicos "hechos" en Internet, que haya podido copiar para completar el de mi familia. Hay algunas personas que me contactan a través de correo electrónico y parecen creer que, puesto que "todo está en Internet", van a encontrar una historia de su familia y su apellido en la red. No es fácil que esto ocurra. Lo que si me ha ocurrido es que, al publicar mis páginas sobre la familia en Internet, me han contactado personas que son mis parientes, algunos en grado muy lejano, pero que descienden de un antepasado común. A veces puede tratarse de una raíz común en el siglo XVIII, más de 200 años atrás. Pero ellos tienen una información que yo no tengo, y viceversa, y eso me ha permitido completar ramas enteras, o, en la mayor parte de los casos, abrir nuevos caminos a la investigación, al proporcionarme nuevos datos sobre los que trabajar.
Uno de los ejemplos más claros ha sido el de mi pariente José Marcelo PÉREZ FLORIDO. Ambos somos descendientes de Tomás de ABREU CRESPO y OROPESA, el que comenzara la historia familiar a mediados del siglo XVIII. Pero José Marcelo desciende de José Domingo, y yo de Lorenzo, dos de los hijos de Tomás. José Marcelo vivía en Barcelona, y yo en Bruselas, cuando me contactó a través de Internet al haber encontrado estas páginas genealógicas. No sólo me proporcionó muchísima y muy valiosa información, sino que además me dijo que Rumeu de Armas, un gran historiador canario, mencionaba en una obra de hacía bastantes años, y simplemente en una nota a pie de página, un libro editado en Bélgica y relativo a las familias de Flandes que colonizaron La Palma. Sabíamos que esas familias formaban parte de nuestros antepasados. ¿Sería posible encontrar el libro? Tras una búsqueda en la "Biblioteque Royale Albert I", la Biblioteca Nacional de Bélgica, en Bruselas... ¡encontré el libro! En él, Fernand Donnet, historiador y cronista de la ciudad de Amberes en el siglo XIX, había analizado las genealogías flamencas de la Isla de la Palma basándose en los archivos y fuentes originales. Sus datos, aunque coinciden en general con lo que se conoce en Canarias, son en algunos casos diferentes y más precisos.
De la misma manera, me han llegado a través de Internet informaciones acerca de unas y otras ramas de la genealogía familiar. Al final de la página inicial expreso mi agradecimiento a varias de las personas que me han proporcionado esa información. Lo más importante de esto es que, parodiando otro refrán, podríamos decir que 'la información va a donde hay información' (el proverbio original dice que 'el dinero va donde hay dinero'). Es decir, el hecho de publicar la información de que dispongo acerca de la familia, ha hecho que otra gente que tiene información complementaria pueda contactarme y ofrecérmela, a cambio de la mía.
Hay muchas líneas que siguen abiertas. El trabajo no está, ni mucho mentos, terminado. Es más, espero que no termine nunca... Eso significará que la familia sigue viva y sigue creciendo. Siempre habrá nuevos campos que investigar, nuevas ramas que descubrir, nuevos acontecimientos que aclarar y relatar.
¿Cuál es el sentido de esta investigación? ¿Presumir de antepasados ilustres y aristocráticos? No es el caso. Me siento muy orgulloso de mis antepasados de la nobleza y pequeña nobleza, pero también de los campesinos, artesanos, burgueses y profesionales. Cuando se estudia la genealogía familiar se descubre que en todas las familias hay... de todo. Personas inteligentes o personas tontas, buenas o malas, honradas o sin escrúpulos. Somos el resultado de la herencia cultural y genética de todos nuestros antepasados... pero somos sobre todo lo que queremos hacer de nosotros mismos. Ahora bien, para construir el futuro hay que partir de una base, el presente, y de un cimiento, el pasado. Sólo conociéndolo, y respetándolo como lo que fue, no como lo que hubiésemos querido que fuera, podremos continuarlo y mejorarlo.
Mi tía-abuela Marietta, la anterior depositaria del archivo, se sentía muy orgullosa de la familia. Ella me transmitió no sólo los documentos, los recuerdos y muchas anécdotas e historias, sino también ese orgullo de ser quiénes somos. Pero para que entiendas mejor en qué consiste ese legítimo orgullo, el refrán que Marietta repetía siempre que se hablaba de la familia era el siguiente:
"¿ Quién fue el Santo varón,
que cuarenta abuelos tuvo,
y ninguno fue ladrón...?"
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© Julio N. Rancel
